[190] Garven -
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Gracias. Tendré que hacer una degustación virtual. En los resturantes de por aquí cada vez ponen más asteriscos con avisos de las enfermedades inmediatas que te pueden asaltar, especialmente si lleva algún trozo de carne. La censura de la carne es la misma que la del sexo, las sensaciones y la virilidad. Están de moda los vegan: www.vegan.org/

Un vegano conocí: el Capitán Puritano, okupa y gente de orden. Cuando íbamos a los bares, se quedaba fuera, objetando. 'Hay que respetarse muy poco para tomar coca-cola', decía. Gente así acabará haciendo nación —y expulsando a los poetas.

Joer gaseosa la pitusa...

y los tigretones

[201] Me da que ponen tantas advertencias para lavarse las manos en cuanto a responsabilidad si alguien enferma.
Los veganos, los macrobióticos, todos tan austeros, es algo que contrasta mucho con los americanos, deseosos de raciones imposibles.

(Lo que ha degenerado el underground, de dionisíaco a hipolítico: del Captain Trips al Capitán Puritano.)

Los tigretones aún existen, pero ¿ubi sunt los bucaneros? Casi todos eran de crema, pero uno llegó a catar algunos de chocolate, divinos y grasientos.

Donde esté el Kas, que se quite lo demás... Cosas del norte de esta España nuestra.

[186] Al59 - 19 de marzo de 2009 23:35:00 CET

El patriotismo menos malo es el irónico (y si semos los mejores, bueno y qué, bueno y qué); pero hasta ése apesta. No importa a qué grupo humano te afilies: siempre habrá gente mejor y peor que tú. Ni en los méritos de la una ni en los defectos de la otra te toca nada. La simpatía o vergüenza ajena que puedan provocarte reposa en un malentendido. Como cantaba aquél, nunca es triste la verdad —lo que no tiene es remedio.
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¿Cuándo se jodió el patriotismo? Quizás cuando supero su ámbito natural de tribu y comunidad para convertirse en ideología fundadora de Nación y ésta terminó por devorarlo nombrándolo agente del orden, en reconocimiento de los servicios prestados. Nación quiso hacernos creer que nos emancipaba de la tribu, cuando era el estado quien ayudaba a éso (con la debida media distancia).

Al, esos eran los phoskitos

regalos y pastelitos

como un minibrazo de gitano radiactivo

¡Los gitanitos! (Esos también siguen.) Pero no me equivoco: se llamaban bucaneros. Los phoskitos (¿lucecitas?) eran otra cosa.

[207] Condesa de Toloño -

Donde esté el Kas, que se quite lo demás... Cosas del norte de esta España nuestra.
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El Kas fue la primera autonomía española, de La Casera. De lo único bueno que hizo fue patrocinar al mejor y más literario ciclista español de todos los tiempos: Ocaña.
(A sus pies, condesa).

[208] El patriotismo nació para jodernos, más bien. Se empieza haciendo idea de nosotros mismos y se acaba recortándonos o estirándonos para que encajemos en la misma.

Reconozcámoslo: Hércor tiene un finísimo oído poético, un avezado oído capaz de captar qué es y qué no es poesía. No lo había dicho hasta ahora, porque no lo consideraba oportuno. Pero la verdad es que el oído de Hércor para la poesía es infalible. Por eso, queridos nickjournalianos, harían bien en seguir a pie juntillas lo que diga Hércor con respecto a la poesía.

Si Hércor dice que una poesía es buena, es que esa poesía es buena. Y si dice que es mala, es que es mala. No creo que sobre esto quepa albergar la menor duda.

Lo que es una pena es lo del paloduz (palulú, decíamos nosotros). A la puerta de mi cole se plantaba el Jacinto, marginal ya talludo, que venía de cortarlo en el río, y con la navaja amarilla te pelaba un extremo. No he encontrado en los herbolarios más que parodias secas y tristes de aquel palulú salvaje.

Por estos lares era paladú.

[210] Al59
¡Los gitanitos!
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Extraña que aún no hayan sido denunciados por alguna agencia estatal o regional de vigilancia de nombres. Lo que demuestra la negligencia de esos vigilantes. O su gula.
Gato Perez-Gitanitos y morenos:
http://www.youtube.com/watch?v=l3N4m8i2bjs

¿Y la cañadú?

Lo de Hércor por la poesía, más que oído, es odio. La más leve brizna de ingenio o talento le provoca urticaria. El otro día me alabó unas líneas y desde entonces las tengo en sospecha.

Cañadú, sí. El paladú y la cañadú. Y los chorlitos. ¡Tales fueron nuestras magdalenas!

No, es usted un mal poeta, Al, reconózcalo. Sus versos cojean y rechinan. ¡Hércor lo vio muy bien!

Usted, Al, sólo volverá a ser un buen poeta cuando diga que yo soy *superior* al Marqués, en todos los sentidos. Y no me mueve vanidad en ello, sino estricto amor a la verdad.

Es que usted, Montano, perdió la calidad analítica el día aquel que creyó que Mercutio había estado más agudo que yo. Puede que la lectura del NJ haya afectado a su sentido ético y estético. Aunque sin prisas, debería plantearse abandonarnos.

[223] Escrito por: Al59 - 20 de marzo de 2009 0:17:00 CET
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Acabáramos! Estaba usted vengándose ahora por lo de Mercutio! Choque esos cinco! Somos almas gemelas!

[0] No, nada fashion...

Hoy no leo más que perlas (sin ironía). Ésta de B. Sutton Smith: We may be disorderly in games either because we have an overdose of order or because we have something to learn through being disorderly. Así la poesía.

[224] Ahí van. (Pero hombre: ¡que haya que explicárselo!)

[227] ¡No me acordaba ya! ¡Mi elogio a Mercutio fue algo tan superficial, tan espumoso...! Jajaja. En fin, me voy a dormir. Boa noite!

Kalinikta!