Sigo la liturgia, el rito,
para lograr ser un mito,
de carbohidratos de madrugada
tres horas antes de la zancada.
El uniforme presto,
el dorsal bien puesto,
el chip bien acordonado,
el músculo bien estirado
La vaselina cubre mis ingles,
amante, protectora pringue,
que protege de la escocedura
del salado sudor de armadura
Puntual, doy el primer paso;
timorato, torpe, todo un caso.
Se activa el chip prodigioso,
se anima el pulso cadencioso
Y al dejar atrás a mi esposa
me acuerdo de la de Tolosa.
Media maratón ¡Cuan dura travesía!
Es como tu vida, San Gil, María
Los kilómetros me voy comiendo,
mientras las fibras voy castigando,
Y recuerdo entonces, tu vía crucis;
lo preterido, para que hagas mutis.
Pues, María, tu dabas la tabarra,
a idiotas, malvados y etarras.
Y aunque para ti una mortal neo,
ha sido, como para el resto un peo;
un psicópata Gaztelu, Txapote,
un frenillo cercenado de cipote,
al final, el centralismo castellano,
te lo ha endiñado Mariano.
En esto, María de mi entretela,
me veo como tu alma gemela,
empiezo como gacela animosa
y me desbravo cual gaseosa.
La media es una distancia ideal,
camino de la maratón infernal,
muchos los llamados a atacar,
muy pocos, el cénit alcanzar.
No siempre limpia es la victoria,
si estás sediento de gloria.
Y aquí es donde pecamos,
pues de buena fe vamos,
y no tomamos ningún atajo;
por eso nos envían al carajo.
Por ende, María San Gil Noain, mi admirada,
prueba por un medio atleta sentirte amada*
*No te arrepentirás....eso dicen
(Escrito por Cateto de Pacifistán)
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