Venga, algo más serio:
El caso Carrillo y su "Libro negro"
22 de Abril de 2010 - 07:59:32 - Pío Moa
Vaya por delante que soy totalmente contrario al encausamiento de Carrillo por los crímenes de la guerra civil, ya que desde 1969, bajo el franquismo, se declararon prescritos, en relación con la guerra, "toda clase de delitos, cualquiera que sean sus autores, su gravedad o sus consecuencias" y quedaba extinta la apertura de investigaciones judiciales al respecto. El indulto y la amnistía posteriores, cuando la coronación de Juan Carlos y en la transición, no se refieren a los crímenes de la guerra sino a otros posteriores (Carrillo podía haber sido juzgado por el maquis, por ejemplo).
Claro está que desde el punto de vista de la historia pueden y deben investigarse las acciones de cada cual, y eso ha hecho precisamente José Javier Esparza en El libro negro de Carrillo, de lectura muy recomendable para, entre otros el ignorante voluntario Baltasar Garzón, más fanatizado por su interés personal que por una idea general cualquiera. El libro trata menos, aunque también, la matanza de Paracuellos, que puede considerarse hoy suficientemente aclarada, y se centra en otras hazañas menos conocidas del personaje, antes y después de la guerra del 36, como su implicación en el terrorismo de las Juventudes Socialistas, en la insurrección del 34, su insistencia en repetirla y bolchevizar a fondo al PSOE, el maquis, el asesinato de otros comunistas o su entrega a la policía de Franco, etc. Verdaderamente, si juzgamos por las acusaciones que insistentemente lanza el personaje y la izquierda en general contra el franquismo, mintiendo tan a menudo al respecto, los principales acusados tendrían que ser los acusadores, y Carrillo como uno de los más destacados.
Así, el argumento de Garzón de que "los crímenes contra la humanidad no prescriben", tendría que aplicarse en realidad y muy especialmente a Santiago Carrillo, autor de la mayor matanza de presos de la guerra, que eludió en su tiempo la acción de la justicia y sigue vivo. Pero, en fin, sobre el acto de Garzón en torno a los "crímenes franquistas", verdaderamente estúpido a fuer de sectario y disparatado, escribiré algunos artículos. No lo había leído hasta hace poco y hube de sorprenderme del modo en que puede aplicarse justicia en España. Claro que el país se halla en plena involución, por no decir descomposición política.
Antes que nada, me gustaría comentar que todo el mundo tenía algo de razón, aunque lo más exacto fue lo que dijeron Fedeguico y el CC: María la portuguesa es una copla con ritmo de pasodoble. De todas formas, en la melodía suenan instrumentos propios del fado, para despistar un poco más. Y ahora ya pueden ustedes pasar.