¿Sensibilidad común?.
Estimada señora Díez:
Apenas nos conocemos, aunque yo, como cualquier español interesado por lo que ocurre en España, sé de su existencia desde hace muchos años como política profesional, y es usted una persona que merece todo mi respeto. Más recientemente, pude ver cómo simpatizaba con nuestro entonces incipiente proyecto de partido en los inicios del año 2006, como tantos otros compañeros a los que luego he conocido en la Agrupación de Madrid de Ciudadanos, la segunda más numerosa.
Posteriormente, tras ser elegido en una votación en listas abiertas miembro de la Ejecutiva de Ciudadanos en el II Congreso celebrado el pasado verano, tuve la ocasión de conocerla personalmente durante los contactos informales que se establecieron tratando de llegar a algún tipo de colaboración con vistas a las elecciones generales. Pese a que la actitud de Ciudadanos fue, como suele decir nuestro presidente Albert Rivera, la de acudir con una hoja de condiciones previas en blanco, usted rompió unilateralmente cualquier posibilidad de acuerdo. Le dije entonces, y le repito ahora, que se equivocaba y que los ciudadanos de España lo tendrían en cuenta.
El pasado viernes 18 fui entrevistado en el programa Hoy en Madrid de Libertad Digital TV. Al término del mismo, los responsables de esa cadena me ofrecieron la posibilidad de un debate con su formación y acepté encantado. Creo que es mi obligación como candidato de un partido que se presenta a las elecciones en toda España el estar dispuesto a explicar, discutir y debatir nuestro programa y nuestras propuestas con otras candidaturas. Se lo debemos a los ciudadanos, para contribuir a que tengan la mayor información posible a la hora de emitir su voto el próximo nueve de marzo, y esa es la disposición del presidente de Ciudadanos y candidato por Barcelona, Albert Rivera, y la mía.
Debo decirle que quedé sorprendido cuando, el pasado lunes en el informativo que dirige Dieter Brandau, usted y Álvaro de Marichalar negaron cualquier posibilidad de debate e insinuaron que Ciudadanos no es un partido nacional, dado que, como ya he explicado y usted bien sabe, lo es desde su principio y nos presentamos en toda España. Dijo usted que no somos sus adversarios, una categoría que circunscribe únicamente a los tres partidos de ámbito nacional con representación parlamentaria. Olvida que Ciudadanos es un partido con tres representantes en el Parlamento de Cataluña, 13 concejales y una alcaldía y más de 60 agrupaciones en toda España. Y aunque no tuviéramos esa representación, es una opción legítima que los españoles encontrarán en las mesas de los colegios electorales el próximo nueve de marzo y que, como tal, merece todo el respeto.
Ciudadanos es alternativa a los partidos tradicionales: un partido que apuesta por terminar con la fuerza desproporcionada que los nacionalistas vienen ejerciendo desde hace más de una década; que aboga por eliminar cualquier tipo de privilegio territorial, como los que suponen en la actualidad el cupo vasco y el fuero navarro; que defiende una regeneración democrática que empiece por el funcionamiento interno de las fuerzas políticas. Quienes integramos la lista de Madrid –en la que hay arquitectos como yo, economistas, abogados, profesionales de la medicina e incluso un estudiante de 19 años–, hemos sido elegidos por un proceso de primarias entre nuestros afiliados. Como partido tenemos un bagaje de dos congresos en los que democráticamente se ha elegido una Ejecutiva y un Consejo General por listas abiertas, así como un ideario y unos estatutos. Sería bueno para el electorado que usted explicase cómo desarrolla su partido los mecanismos de participación y democracia internas.
Creo, como muchos, que la cita electoral del 9-M es muy importante para el futuro de este país. Existe, por vez primera desde la Transición, la posibilidad de que entre en el Congreso un partido no nacionalista, progresista y moderno, que ponga coto a la sinrazón de los nacionalistas periféricos que, junto a la pusilanimidad de los dos grandes partidos, están acabando con la idea de Estado moderno en España. En Ciudadanos venimos trabajando desde hace dos años para que eso sea posible, por encima de personalismos.
Somos un partido de profesionales que se ocupan de la política, ya que no necesitan de ella para vivir. Se ha quejado usted en muchas ocasiones, y seguramente con razón, del trato que le dieron en el PSOE, donde militó hasta hace pocos meses. El respeto que usted exigía como militante de un partido democrático es el que merecemos todos los que nos dedicamos por conciencia a la política.
Por tanto, pensamos que una democracia moderna y avanzada como la que queremos para España se ayuda a construir con información a los ciudadanos: debates y explicaciones. Se lo debemos a los electores.
Fernando Landecho
Candidato al Congreso por Madrid
Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía
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