Qué par de cabrones.
Me he librado del soborno del cielo. Cumplamos la obra de Dios por ella misma; la obra para cuya ejecución nos creó, porque sólo pueden ejecutarla hombres y mujeres vivientes. Cuando me muera, que el deudor sea Dios y no yo.
Bernard Shaw, Major Barbara (1905)
JUSTO CASTIGO
Los demonios me contaron que hay un infierno para los sentimentales y los pedantes. Así los abandonan en un interminable palacio, más vacío que lleno, y sin ventanas. Los condenados lo recorren como si buscaran algo y, ya se sabe, al rato empiezan a decir que el mayor tormento consiste en no participar de la visión de Dios, que el dolor moral es más vivo que el físico, &c. Entonces los demonios los echan al mar de fuego, de donde nadie los sacará nunca.
Adolfo Bioy Casares, Guirnalda con amores (1959)
LA DICHA ETERNA
F. W. H. Myers, a quien el espiritismo había convencido de la realidad de una vida futura, interrogó a una mujer que acababa de perder a su hija sobre el destino que, según ella, le habría tocado a su alma. La madre contestó:
-Bueno, sin duda estará gozando de una dicha eterna, pero no sé por qué usted se empeña en hablar de temas tan desagradables.
Bertrand Rusell, An outline of intellectual rubbish (1943)
EL HOMBRE ELIGE SU ETERNIDAD
Cuando un hombre penetra en la otra vida es recibido por ángeles, que lo atienden, lo favorecen y le hablan del Señor y de las venturas celestiales. Pero si el hombre, ahora un espíritu, es de aquellos que en la vida fueron enemigos de Dios, no tarda en fastidiarse y en despreciarlos, y procura rehuirlos. cuando los ángeles advierten esto, lo dejan, y el espíritu busca el trato de sus congéneres. Así se aparta del Señor y vuelve su cara al Infierno, al que ha estado vinculado en la tierra y donde están aquellos que adolecen de su misma depravación; por su propia voluntad, no por la del Señor, desciende al Infierno.
Emanuel Swedenborg, De coelo et inferno (1758)
LA CADENA ILUSORIA
Si el mundo externo fuera algo más que una magia, sería indestructible. El mundo es irreal. Las cosas vacías engendran cosas vacías; el culto de un Buddah ilusorio confiere un mérito ilusorio; el asesinato de un fantasma proyecta dolores imaginarios en infiernos mágicos.
L. de la Vallée Poussin, Bouddhism (1909)
UN CABALLO COMO DIOS MANDA
Un árabe encontró al Profeta y le dijo: '¡Oh, Apostol de Dios! Me gustan los caballos. ¿Hay caballos en el Paraíso?' El Profeta respondió: 'Si vas al Paraíso, tendrás un caballo con alas, y lo montarás e irás donde quieras.' El árabe replicó: 'Los caballos que me gustan no tienen alas.'
Thomas Patrick Hughes, A dictionary of Islam (1935)
SU INVENTOR
Mi padre solía decirme: piensa en un ser capaz de inventar el infierno.
John Stuart Mill, Autobiography (1873)
SE DABA SU LUGAR
Andrea, la sirvienta, está preocupada.
-En el Socorro -explicó- el Padre nos dijo que hay otra vida. Si una supiera, señora, que le va a tocar una casa buena, como ésta, en que la tratan a una con consideración, no me importaría, pero francamente trabajar allá con desconocidos, con déspotas que abusan de la pobre...
Rita Acevedo de Zaldumbide, Minucias porteñas del otro siglo (1907)
Etiquetas: Mercutio
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