PRISANOSTRA
Lunes, 26 de Marzo de 2007
Prisa quiere explotar el documental ecologista de Al Gore en España con una gira por colegios y el patrocinio de los ‘amigos’ de Cebrián en Fomento
La operación se lleva con total discreción. Sogecable se ha hecho con los derechos para España del ‘oscarizado’ documental de Al Gore sobre el cambio climático. Su intención es realizar proyecciones en colegios e institutos gracias al patrocinio del departamento que dirige Magdalena Álvarez.
Se eligió para su estreno internacional el prestigioso Festival de Cine de Cannes. Hace unas semanas, se alzó con el Oscar al mejor documental y la estatuilla a la mejor canción, en la 79 edición de los famosos premios de cine de Hollywood. Se trata del documental auspiciado por Al Gore, titulado ‘An Inconvenient Truth’ (Una verdad inoportuna), y es parte de la campaña del ex vicepresidente estadounidense alertando sobre los peligros del calentamiento global, la desertización del planeta y la disminución de los recursos naturales básicos.
Según ha podido saber El Confidencial Digital por fuentes cercanas al proyecto, el Grupo Prisa a través de Sogecable se habría hecho con los derechos para España de este film en defensa de la preservación del medioambiente, una obra muy crítica con dos de los principales países desarrollados, Estados Unidos y Australia, que aún no han ratificado el Protocolo de Kyoto sobre cambio climático.
Hay que recordar que el documental incluye invectivas explícitas a la gestión medioambiental del actual presidente de EEUU, George W. Bush, así como a la supuesta manipulación de informes de científicos, que recogerían conclusiones molestas o inconvenientes para determinados intereses políticos y económicos.
Las mismas fuentes consultadas por ECD explican a este confidencial que la intención inicial de los directivos de la compañía que preside Jesús Polanco es llevar este documental por los principales colegios del país, para mostrarlos a los jóvenes españoles.
Para financiar la compra de los derechos y la gira por los centros educativos, el Grupo Prisa se ha dirigido al Ministerio de Fomento para lograr, gracias al patrocinio de alguna de las empresas estatales dependientes de este departamento, dar con la financiación necesaria. En la compañía editora se recuerda la conocida amistad que une a la ministra Magdalena Álvarez con el consejero delegado de la compañía multimedia, Juan Luis Cebrián.
De hecho, los últimos datos que manejaba el grupo apuntaban la posibilidad de que fuera Renfe la sociedad elegida para este acuerdo. Se ha hablado incluso de cantidades económicas concretas. ECD ha confirmado una cifra que ronda los 800.000 euros en concepto de patrocinio. Por lo pronto, este confidencial se ha puesto en contacto con un portavoz oficial de la empresa de servicios de transportes ferroviarios, que ha asegurado: “al menos hasta ahora, nadie nos ha hecho llegar una oferta en firme sobre esta materia”.
ECD se ha puesto en contacto, además, con los gabinetes de comunicación de Prisa y Fomento a los que se les ha solicitado más información sobre este proyecto. Ninguno de estos dos departamentos ha devuelto las llamadas.
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Cuatro se “avergüenza” del discurso de Jesús de Polanco contra el Partido Popular
La cadena de televisión del Grupo Prisa, Cuatro, no parece estar muy conforme con el discurso que pronunció el presidente, Jesús de Polanco, en la última junta general de accionistas. Al menos, no lo suficiente como para darle la máxima difusión. Más bien todo lo contrario. Como si se “avergonzara” de lo ocurrido o poco menos.
La cuentan a El Chivato que la emisora se negó a facilitar las imágenes de esa intervención de Polanco, que le pidieron otras cadenas de televisión que no disponían de ellas y querían hacerse eco del hecho en sus informativos, dada la relevación de lo ocurrido y las consecuencias posteriores.
Le consta a El Chivato que varias cadenas, incluyendo la “oficial” Televisión Española pero también la agencia EFE, además de las privadas, solicitaron a Cuatro que les facilitara esa grabación. Pero fue en vano. En el caso de EFE Televisión, el objetivo era distribuir las palabras de Jesús de Polanco a sus abonados (prácticamente todas las televisiones de España), que así se lo habían demandado. Es más, la respuesta de Cuatro fue la negativa, pero sin dar ninguna explicación de por qué no suministraban las imágenes.
Por si fuera poco, hasta la Cadena SER pareció querer “tapar” a su presidente, porque a finales de semana en su web no habían cargado el sonido con la intervención de Polanco, en la que arremetía contra el Partido Popular.
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LAS PESQUISAS DE MARCELLO
Polanco pierde los nervios
La reacción del diario El País y demás medios del grupo Prisa a la crisis abierta entre este importante club mediático y el PP ha demostrado que los poderosos editores del entorno del Gobierno y del PSOE han acusado el golpe y perdido la primera partida. Los dos editoriales lanzados por el diario El País, el sábado y el domingo, son una prueba del nerviosismo de la casa, que ha salido como un huracán a defender al patrón Polanco, que se fue de la lengua pero no de la cabeza, porque dijo lo que pensaba, como muy bien aclaró el soberbio amo de Prisa, por más que esté en retirada y decadencia física. Lo que no le resta responsabilidad porque él siempre habló así, desde que se hizo hace ya muchos años con el control de la empresa y cercenó la que fue incipiente independencia del diario El País, al inicio de la transición.
Y buena prueba de que Polanco ha metido la pata es que El País y sus medios no fueron capaces de poner en valor al día siguiente sus polémicas palabras, la soflama del jefe contra el PP de Rajoy. Sólo lo hicieron cuando el PP respondió, una vez que ocultaron en sus primeras noticias y editoriales la seria acusación de que el PP quiere el retorno de la guerra civil —seria por acusación, no por realista—, y acto seguido empezaron todos a rasgarse las vestiduras, sin recordar que algo similar había hecho la COPE episcopal con ABC, y el PSOE con Telemadrid —la emisora del terror y del juicio paralelo al 11M—, algo que Zapatero, con la frivolidad que le caracteriza, pasó por alto para hacer la pelota a Polanco, y no digamos el autor directo del boicot a Telemadrid, Pepiño Blanco, que se presentó ayer como matador de otros boicots, con ese aire de mister Bean que tanto le caracteriza.
Prisa ha reconocido, y eso es lo más grave de lo que dijo Polanco, que no es neutral en la batalla política, mediática, económica y cultural. Pero eso ya lo sabíamos, y aunque el nuevo director, Javier Moreno y sus muñecos, intentó hacer unos pinitos equidistantes de la Moncloa en un artículo en el que criticaba la política autonómica y terrorista de Zapatero —que supo a rayos podridos en la Presidencia— para ver si así marcaban algo de distancia y no perdían más lectores de los que ya están perdiendo, precisamente por causa de esas demenciales políticas antiespañolas de Zapatero, al final Polanco sacó el garrote y se lío a palos con el PP desatando su furia verbal. La que, tarde y mal, puso a todo trapo la flota de Prisa para empezar a cañonear los flancos del PP, donde están muertos de risa por el lío organizado que a ellos no les va a quitar, ni aportar, electores, pero que a los de Prisa y El País los deja con el culo al aire. Pero ¿cómo se atreven, aunque sea verdad, a denunciar desde El País las concesiones de licencias de radio y televisión hechas por los gobiernos autónomos del PP a sus amigotes mediáticos? ¡Pero si la mayoría del imperio audiovisual de Prisa proviene de las ayudas de los gobiernos del PSOE!
El problema del Grupo Prisa es que se comporta como los fanáticos del PP, la COPE y El Mundo —y con Pedro J. coinciden en la estrategia de no tocarle un pelo a Zapatero, al que el director de El Mundo suele llamar el “ingenuo”—, manipulan las portadas, los titulares y no admiten el menor pluralismo en sus habituales opinadores, los que en el casi 80 por ciento de sus artículos están dedicados en cuerpo y alma a poner a parir al PP, en un ejercicio de control de la oposición, en vez de control del Gobierno, impropio de un medio de comunicación democrático que se precie de serlo. Sobre todo cuando están ocultando los graves errores del presidente, como ocultaron las responsabilidades de Felipe González en los gobiernos de los GAL y la corrupción, o como se ha tapado en ese diario que pone escarapelas de franquistas a todo el PP, el franquismo de Polanco y de Cebrián y Mendo, entre otros muchos.
El grupo Prisa está en crisis de identidad, de independencia y tecnológica, y además está a la espera de las consecuencias de la sucesión de Polanco, que sólo será real una vez que desaparezca su actual “dictador”. El que dice que no puede ser neutral, o el que decían que afirmaba aquello de “no hay cojones de no darme a mí un canal de televisión”, o “tengo mas abogados —el fascista Córdoba entre otros, estaba ahí— que periodistas”, cuando podría haber dicho que tenía más jueces que abogados a su disposición. Pero ahora, Polanco, en su patética decadencia, se bate en retirada, bramando y organizando un último follón, en el que el PP se divierte, aunque los del PP no tienen razón porque lo de poner vetos a medios es indigno de un partido democrático. Como indigno es lo que han hecho Rajoy y su liberticida Aguirre con Telemadrid, o lo que hacen con los medios independientes y los profesionales que no se prestan a su no menor manipulación, comparable a la de Prisa y del PSOE. En fin, como dos carneros enfurecidos, están dándose topetazos el PSOE y el PP, un bonito espectáculo que lleva al campo de los medios de comunicación, que forman parte de las distintas escuderías militantes como lamentablemente ocurre en el caso español.
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